Festival Cultural
JOSHUA H. MENDOZA JASSO
El Festival Cultural de Zacatecas fue presentado la semana pasada por el Gobernador del Estado. Se presentó un Festival de sólo una semana, sin grandes artistas y que se estará desarrollando en pocos espacios en lo que a la capital se refiere.
El Festival es en sí un evento ancla para el sector turismo, es un tiempo que muchos de los comerciantes del Centro Histórico esperan ya que se presentan una de las mejores ventas del año pero, a su vez, el Festival es el gran dolor de cabeza para los pocos habitantes que quedan en el Centro Histórico y es también un tema importante para los ambulantes que esperan con ansia las fechas para salir a las calles.
La verdad es que poco se trabaja o se piensa sobre todo lo que conlleva realizar un evento de esta magnitud. Me parece que por primera vez se analiza que el Festival genera basura, que el Festival genera gastos de mantenimiento de la ciudad, de ordenamiento vial, de apertura de baños públicos y de un dispositivo de ordenamiento que debe llevarse a cabo. Y que a mí parecer, es tan importante como el programa cultural mismo.
El programa del Festival contempla la participación de un buen número de artistas locales, como decía, se presenta un programa más apegado a la vocación con la que nació esta tradición, un Festival Cultural y no un cartel de Feria de Pueblo. Decía que el sentido de esta colaboración es presentar a todos los lectores los factores que se deben tomar en cuenta para realizar el Festival:
Facilitar a los productores de dulces espacios para su venta al público; facilitar de igual forma espacio para artesanos locales y nacionales, pocos saben que llegan al estado más de 60 artesanos que envía el Gobierno Federal para estas fechas; aquí, sumemos los vendedores de comida chatarra, elotes, tamales, gelatinas, juguetes, y una larga lista de artículos.
El problema crece al insertar en esta gran ecuación los dispositivos de seguridad, que implican desde el orden vial, los cierres de calle, así como las medidas de seguridad para el desarrollo de todas las actividades en el primer cuadro de la ciudad.
El Festival es en sí un sistema complejo; un sistema que debe recaer en un patronato, en un fideicomiso o en un equipo que trabaje todo el año para ordenar de manera sistémica a todos los actores; que siente un precedente sobre cómo deben desarrollarse las actividades.
El Festival nos deja a los zacatecanos un espacio donde divertirnos, nos deja disfrutar la ciudad de una manera distinta, acerca la cultura a grupos de la sociedad que carecen de estas oportunidades pero, sobre todo, es un espacio de expresión para muchos artistas que no cuentan con los recursos para publicitarse y que no tienen actividad a lo largo del año.
La sociedad en general debe trabajar en su cultura, somos un país que poco invierte en el tema y, principalmente, no generamos economía a partir de las actividades culturales.
Zacatecas trabaja ya para generar un Festival digno, un Festival cercano a sus orígenes, pero sobre todo un Festival que nos permita decir que Zacatecas abre sus puertas a la Cultura y al Turismo.
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