Cuentos chinos a Zacatecas
RAÚL SILVA TORRES
Cuántas veces hemos escuchado decir: ¡Tenemos el respaldo total del Ejecutivo federal!, ¡Enrique Peña Nieto es amigo de los zacatecanos!, ¡La federación no nos dejará solos!, y demás expresiones, que alardean la supuesta intima amistad que existe entre el gobierno d la república y el de Zacatecas.
Esa amistad estrecha existe únicamente en la realidad subalterna de los que dirigen la entidad. En la práctica el gobierno federal no mira a Zacatecas, no le es de interés ni mediático, ni político, ni electoral, ni económico.
Siempre hemos sido tratados como un estado atrasado, de segunda. ¿A caso se nota el mismo el interés que despiertan otras entidades como Estado de México, Jalisco, Nuevo León, Puebla, Coahuila, Veracruz, entre muchas otras?.
No conforme con ese trato desigual, nuestro gobierno estatal, todavía se enorgullece en pregonar que Zacatecas es el estado más priista del país. La pregunta es simple: ¿A servido de algo? la respuesta también es muy simple.
Tan es así que seguimos con los mismos niveles de pobreza y rezago. No ha servido para bajar recursos que permitan vivienda digna, alimentación adecuada, servicios básicos decorosos, empleo justo, seguridad pública eficiente, entre muchos otros factores.
Aún así, hay habitantes de Zacatecas que se creen los cuentos chinos, y se empecinan en seguir de tapete electoral, cuyo gobierno federal es incapaz de mirar tantito para este lado.
Zacatecas tiene una geografía envidiable, pero su desventaja es estar blindado por entidades altamente industrializadas. Al norte tenemos a Coahuila, al noreste a Durango y Nayarit, al este a San Luis Potosí y Nuevo León, y al sur a Jalisco, Guanajuato y Aguascalientes.
Las diferencias económicas son abismales entre Zacatecas y sus vecinos. Nuestra industria es insipiente, la modernización agrícola es casi inexistente, y la base de nuestra economía es la megaminería.
El gobierno federal, sin miramientos, dio una puñalada por la espalda a Zacatecas, al promover una Controversia Constitucional contra el impuesto ecológico que obligaría a pagar a las compañías mineras instalada en la entidad.
Con esta medida jurídica, la federación prefirió apoyar abiertamente al empresariado metalúrgico, y dio la espalda a nuestra entidad, bajo el argumento, que los estados no están facultados para cobrar impuestos a la industria minera.
“Alejandro Tello se la jugó con Peña (Nieto)” señaló el gobernador del estado, al referirse a la relación cercana que priva con el ejecutivo federal y justificó que “fui parte de las modificaciones que el país tuvo en una reforma energética y educativa, y yo esperaría lo mismo, esa reciprocidad hacia Zacatecas”.
Desde el sexenio de Miguel Alonso hasta la actualidad, se ha pregonando que para él gobierno de Peña Nieto, Zacatecas es una entidad importante. Todo ha sido de palabra y no de hechos.
Por ejemplo, el presidente de la república no ha cumplido con los cinco compromisos que firmó ante notario público en la entidad en 2012. Dio prioridad a dos de ellos: la construcción del ecoparque Centenario y de una parte mínima de la autopista Jerez-Tlaltenango- Guadalajara.
Se olvidó de la modernización del campo con la sustitución de cinco mil 500 equipos electromecánicos para extraer agua, la edificación de la aduana interior y recinto fiscalizador y dotar de infraestructura de agua potable a Fresnillo.
Peña Nieto tampoco se mostró benevolente con Zacatecas al destinar solamente seis mil 320 millones de pesos de los 7.7 billones de pesos que se ejercerán dentro del Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018.
Los proyectos para el estado fueron menores como carreteros (dos mil 475 millones), hidráulicos (tres mil 445 millones) y programas de desarrollo turístico regional (400 millones).
En otros estados optó por fondear los trenes de pasajeros México-Querétaro y México-Toluca, el Transpeninsular en Quintana Roo y Yucatán, la ampliación del tren eléctrico en Guadalajara y el Metro de Monterrey y la construcción de un libramiento ferroviario en Celaya, Guanajuato.
La generación de infraestructura energética en la Cuenca de Burgos: Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, la modernización de las refinerías de Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz y Tula en Tamaulipas, entre otros. ¿Notan la diferencia?.
Hasta un ciego puede ver que la amistad del presidente mexicano y el zacatecano es un cuento chino. De lo contrario, mínimamente apoyaría a nuestra entidad absorbiendo la nómina magisterial de los alrededor de 9 mil maestros que representa un gasto anual de mil 200 millones de pesos a Zacatecas. Ahora si que de dicho al hecho hay mucho trecho…
* Periodista independiente