Las Piezas del Ajedrez: Sabio tiempo
EFRAÍN ESPARZA MONTALVO
El 19 de septiembre de 2010 se publicó un artículo de mi autoría en un diario local el que advertí sobre la corrupción que marcaría al sexenio de Miguel Alonso Reyes. Señalé también que el gobierno sería un fracaso por el modelo de improvisación que había adoptado en materia de políticas públicas, y que la figura del mandatario terminaría desgastada como ninguna; seis años después y cuando todo parece tomar su lugar, con la misma firmeza con que enfrenté a los demonios del alonsismo puedo decir que acerté, que mis pronósticos sobre una administración fallida, de ocurrencias y exageradamente frívola, se cumplieron.
La información que la semana pasada publicó el diario El Universal y que detalla los presuntos actos de corrupción de Miguel Alonso Reyes y su parentela encabezada por el hermano mayor Juan Manuel, y que desde el segundo año de gobierno eran del dominio público, confirma la voracidad con que a lo largo de seis años se condujo el inexperto gobernante y que terminó imponiéndose a su real deseo de hacer bien las cosas, de conducirse con honestidad para trascender más allá de lo local y figurar en las grandes ligas de la política, porque hay que decirlo, Miguel llegó con los suficientes bonos como para aspirar a la presidencia de la república pero él mismo se encargó de minarlos gracias a su soberbio corrupto y frívolo proceder.
Casi al inicio del sexenio, en una de tantas conferencias de prensa a las que convocó el entonces “vocero” Mario Caballero Ramírez para dar a conocer información en materia de seguridad, el que esto escribe inquirió al secretario general de gobierno Esaú Hernández Herrera sobre la posibilidad de renunciar a su cargo ante los rumores de presuntos actos de corrupción cometidos hacia al interior del gobierno, y su respuesta fue contundente: “tengo información al respecto que se está investigando, por lo pronto ya se la di a conocer al señor gobernador.” Meses después el ingeniero se separó de la secretaría general.
La pregunta a Esaú se sustentaba en el hecho de que cuando rindió protesta del cargo públicamente se comprometió a combatir cualquier acto de corrupción en el gobierno. Los hechos de podredumbre sin embargo fueron tantos que optó por no ser palero de los mismos y renunciar.
La claridad pues con que los diarios nacionales y algunos locales han revelado información que involucra a Miguel Alonso Reyes en el engrosamiento descarado de su patrimonio es señal inequívoca de que la política es un negocio redondo que no implica más esfuerzo que el presentarse con la cara bonita pero sin cerebro, al menos no para cumplir con la tarea que les es encomendada, y sí para enriquecerse a manos llenas sin que nada ni nadie lo impida.
Si como dice el gobernador Alejandro Tello que investigará el presunto proceder corrupto de su antecesor, entonces estaríamos ante la inminente posibilidad de que Miguel pise la cárcel y con él sus incondicionales empezando por su hermano Juan, al menos por algunos años, aunque me temo que sus declaraciones fueron más bien mediáticas en el ánimo de apagar el fuego que sin embargo todavía arde por la importancia del tema.
Si a la casa Bellagio le añadimos el presunto amaño en las licitaciones para favorecer a empresas de sus familiares y amigos, y el diezmo convertido en triezmo de las obras de infraestructura, estamos frente a un mundo de dinero cercano a los 50 mil millones de pesos que habrían ido a parar a las cuentas privadas de no más de cinco personajes, entre ellos Juan Alonso, su cuñado Noé J. Cantú Reyes, y el propio Miguel Alonso, además de otros personajillos que sirvieron de fontaneros en el gobierno como Guillermo Huizar Carranza y Fernando Soto Acosta.
La conclusión es pues que el sabio tiempo me dio la razón.
De salida 1.- Los seguimos invitando para que nos acompañen todos los lunes, martes y jueves de 5 a 6:30 de la tarde, en Las Piezas del Ajedrez radio, por www.sustaitaradio.com para que juntos construyamos ciudadanía.
De salida 2.- La decisión de Morena de no participar en la elección extraordinaria en el municipio de Zacatecas pegó duro en el ánimo de los morenistas de corazón. Y es que afirman que nomás los utilizaron para ponerle al PRI las cosas en charola de plata como de hecho ocurrió. Se sienten defraudados porque creyeron en el proyecto que encabezaron David Monreal para la gubernatura y Soledad Luévano para el municipio, no obstante, ahora que les dijeron que nanais, se encabritaron y mandaron al diablo a la institución y a sus dirigentes y no lo dude que hasta al propio Andrés Manuel en la elección del 2018; así las cosas.
De salida 3.- Siguen los conflictos en el Ceciuaz, por la dureza, dicen, con que se conduce la nueva coordinadora Laura Ofelia Márquez Sandoval, no sólo en contra de las trabajadoras administrativas sino de las propias docentes; de hecho el grupo que lidera la antigua coordinadora Imelda Piña Robles, hace como que ni la ve ni la oye, lo que ya generó roces entre el propio personal docente y que terminará, como aquí se lo adelantamos, con la separación más pronto que tarde de Laura Ofelia, a la que señalan de tener las mismas mañas que su hermana Margarita. Veremos en qué termina la telenovela de la escuelita.
De salida 4.- Hoy termina la edición 2016 de la Feria Nacional de Zacatecas, y las quejas de los ciudadanos no se hicieron esperar: más de lo mismo y espectáculos de muy mala calidad. Lo anterior se notó con lo escaso de los visitantes y la falta de feriantes que no llegaron como en otros años a abarrotar los espacios para expender sus mercancías; la feria, dicho de otra forma, fue un fracaso.
Hasta la próxima.
El autor es analista.
