Catástrofe Olímpica
JOSHUA MENDOZA JASSO
La gran catástrofe del deporte mexicano hace su aparición en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. El Titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), Alfredo Castillo se ha encargado una vez más de ser el centro de atención por su desastroso desempeño, malos manejos de la Comisión y un sin número de problemas que conllevan a una de las peores presentaciones de México en una justa Olímpica.
El primero de los problemas que se generaron fue la adquisición de los uniformes de la delegación mexicana. Aquí, la CONADE decidió gastar 14 mil pesos por cada uno de los uniformes de gala que usó en el desfile inaugural dando un total de 4 millones de pesos los que se gastaron sólo en los uniformes, 4 millones de pesos que no se quedaron en México, ya que una firma alemana de artículos de lujo fue la beneficiaria de esta compra.
La diseñadora mexicana María Luisa de Chávez fue la encargada de denunciar este hecho y manifestar que la CONADE rechazó su propuesta de uniformes por considerarla demasiado elevada. La cotización de esta diseñadora internacionalmente reconocida no rebasaba los 400 mil pesos, entonces, ¿por qué en México decidimos apoyar marcas extranjeras?, ¿por qué siempre un mexicano es el principal enemigo de otro mexicano? El 29 de junio pasado la CONADE presentó el uniforme oficial, uniforme diseñado por una marca estadounidense.
Parecía que México sólo se quedaría con la medalla de bronce, sin embargo, Lupita González, logró ayer viernes, la primera de plata en marcha de 20 kilómetros para México, lo que nos ubicó en el lugar 64 del medallero olímpico, fue suficiente, una más para subir del lugar 72 al 64.
Estos resultados son muy preocupantes y más porque el ganador de esta medalla, el boxeador Misael Rodríguez denunció, meses atrás, la falta de apoyo al pedir dinero en las calles para poder cubrir los gastos y asistir a uno de los campeonatos mundiales. Los problemas generados por malos manejos entre la CONADE y las Federaciones generan la falta de apoyo al elemento más importante: los atletas.
Pero este no fue el único problema, también el halterista Bredni Roque manifestó, en su cuenta personal de Facebook, por qué tuvo que competir con un uniforme lleno de parches. Situación que molestó a más de uno por la buena presentación que tuvo este atleta y, por si fuera poco, el titular de la CONADE pasó la culpa al Comité Olímpico Mexicano y se deslindó de este hecho.
El gran problema de nuestro país es que cada cual decide y camina solo; la CONADE no impacta en empresas locales que pueden surtir y vestir a los deportistas; los deportistas no se comprometen con el país que representan y que genera presentaciones que dejan mucho que desear. Se premia a los amigos en los cargos de mayor peso, es el caso de Alfredo Castillo, no podemos encontrar una explicación lógica del porqué una persona incapaz, ineficaz, y con una larga trayectoria de malos manejos y pésimas decisiones es la encargada del deporte en México.
La legislación debe corregirse y se debe realizar una reestructura importante a la CONADE y a las federaciones.
México no merece aparecer en los últimos lugares de la tabla. La inversión, infraestructura y tamaño de población es muy superior a la de muchos de los países que se encuentran arriba de nosotros en el medallero.
Ojalá y esta nueva debacle ayude a que algún mexicano despierte y tome cartas en el asunto.
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