Voces catastrofistas
GERARDO DE ÁVILA
Aunque nunca faltan las voces catastrofistas que predicen que la Universidad Autónoma de Zacatecas cerrará sus puertas, consecuencia de un innegable desorden financiero, quien escribe, sostiene lo contrario: la UAZ permanecerá de pie si se toman decisiones inteligentes.Urge limpiar la casa.
No reconocer que el futuro de nuestra la universidad es incierto y que su permanencia en la sociedad de Zacatecas depende de decisiones firmes e inteligentes de los universitarios y de la voluntad política de la SEP y la SHyCP, es engañarse uno mismo.
Pero sí hay salidas.
Me parece, que en esta compleja historia, el actual rector Armando Silva Cháirez tiene parte de culpa al no presentar en tiempo y forma el famoso proyecto de reingeniería financiera a Luis Videgaray, Secretario de Hacienda y Crédito Público.
No hay tal proyecto.
Dicho con propiedad, quienes nos hemos formado en la universidad pública creemos en ella. Cierto es que tampoco podemos negar que hay una amenaza constante de querer cerrar algunas universidades que financieramente no marchan bien. Zacatecas es un ejemplo.
Defendamos a la UAZ.
En medio de esta discusión, surge la necesidad de un nuevo modelo de universidad para Zacatecas, aunque primero, la noble institución tendrá que resolver de fondo la aguda crisis financiera que la tiene al borde del colapso. El actual rector ha sido incapaz de revertir la deuda.
¿Quién se aventará el reto?
En descargo de la UAZ y sus adversidades se vuelve indispensable consignar que el presupuesto que asigna la Federación no corresponde con la matrícula que atiende la universidad hoy día. Dicho con propiedad hay una deuda pendiente. El trato ha sido desigual.
Las cosas por su nombre.
La sucesión en marcha
Pongo énfasis en el título de esta entrega, hay voces catastrofistas que quieren ver a la UAZ cerrando sus puertas para los jóvenes zacatecanos, de otros estados y hasta de otros países, aunque somos más quienes pensamos que dicho cierre no ocurrirá.
Así lo creo. Así lo siento.
No hay que olvidar que en 2016 la Universidad Autónoma de Zacatecas elegirá un nuevo rector y que más allá de quien llegue, sea el idóneo, eso incluye que tenga un proyecto serio de rescate de la institución. Un nuevo modelo de universidad pública es posible.
¿Quién le entra?
Por cierto, no sorprende que los ex rectores Alfredo Femat Bañuelos (hoy diputado local) y Francisco Javier Domínguez Garay hayan limado asperezas. En todo caso, la duda que ronda ahora, es saber quién de los dos pondrá al candidato.
¿Femat o Domínguez?
Con la aparición de Renacimiento Universitario y Grupo Universidad los escenarios se movieron al interior de la universidad, y es probable que al actual rector (quien en el pasado era parte del proyecto político) también le hayan movido sus planes.
Pronto lo sabremos.
Hasta aquí, lo único seguro es que Renacimiento Universitario y Grupo Universidad van juntos en la sucesión donde se elegirá al nuevo rector, aunque en la elección para gobernador (que también les incumbe) van con otro proyecto político.
¿O ya pactaron?
En suma, los problemas de la universidad son complejos pero tienen solución. La universidad debe erradicar viejos vicios, malas prácticas, transparentar sus acciones, rendir cuentas, pero sobre todo, tiene que ir pensando en la nueva universidad que requiere Zacatecas.
Aprovechen la crisis.
Del archivo personal:
Contando los votos en la LXI Legislatura del Estado, de los diputados afines que estarían a favor del nuevo empréstito por mil 700 millones de pesos, lo que viene es su aprobación. Al tiempo.
Es tan sólo una opinión.
(*) Periodista
Maestro en ciencia política