Por dinero y líos pasionales asesinan a magistrada federal
Aguascalientes, Ags.- Los tres implicados en el homicidio a balazos de la magistrada y su hijo, ya fueron enviados al CERESO y están a disposición de un juez por el delito de homicidio doloso calificado con premeditación, alevosía, ventaja, traición y el grado de parentesco con las víctimas.
Se trata de Sara Morán Hernández de 40 años de edad, su hijo Emilio Moisés Sánchez Morán de 19 años y el amante de la mujer Hugo Sánchez Beltrán de 25 años.
Como se informó oportunamente, fue el pasado domingo por la mañana cuando trabajadores de la Quinta El Cordero ubicada en la calle Porfirio Díaz Mori 302 de Valladolid Jesús María, al llegar a sus labores descubrieron que la patrona estaba sin vida, por lo que avisaron a los co-habitantes del mismo predio y estos se encargaron de llamar a las autoridades.
Todos los ahí presentes, entre trabajadores y los “vecinos” del mismo predio fueron trasladados a la Policía Ministerial para llevar a cabo una serie de entrevistas y esclarecer los hechos. La que se puso más nerviosa y cayó en contradicciones fue Sara Morán Hernández, quien aceptÓ haber planeado junto con su hijo y amante el doble homicidio.
Dijo que en el mismo predio vivía ella con su hijo en una casa y en el otro extremo en otra casa la magistrada y su hijo. La conexión entre ellas surgió cuando Sara vivía en el Estado de México y conoció un hombre del que se embarazó y nació Emilio Moisés. Dicho hombre le dijo que se viniera a vivir con él a Aguascalientes, ya que tenía un terreno muy grande y había construido dos casas, una para su esposa (la magistrada) y la otra iba a ser para ella (Sara).
A la muerte de dicho hombre, la magistrada decidió contratar los servicios de Sara para que se desempeñara como su chofer. La propia Sara reconoce que fueron surgiendo conflictos entre ellas y entre los hijos de las dos; incluso estos llegaron a pelear y el que sacó la peor parte fue el hijo de Sara, quien desde entonces fue albergando mucho coraje en contra de su medio hermano.
Sara manejaba algunas cuentas de la magistrada, así que estaba enterada de las cifras que tenía en el banco y la ambición la comenzó a invadir. Junto con el deseo del dinero, existía el coraje de los medios hermanos hasta que madre e hijo decidieron planear el doble homicidio con ayuda del amante de Sara.
La noche del sábado 25 de Julio, madre e hijo cruzaron el predio que divide las casas para “visitar” a la otra familia. Sara se quedó en la cocina platicando con la magistrada Ana María Mújica y Reyes de 66 años, mientras que Moisés se dirigió a la habitación de Manuel Fernando Sánchez Mújica de 27 años.
Estaban listos con una pistola calibre 22, en determinado momento y cuando las dos mujeres ya estaban en una habitación, apareció Moisés con la pistola y se la entregó a su madre y esta disparó en una ocasión en contra de la magistrada.
Moisés tomó el arma que empuñaba su madre y se dirigió a la habitación de Manuel Fernando al que encontró recostado en la cama escuchando música y sin tener piedad también le disparó en dos ocasiones en la cabeza.
Madre e hijo se retiraron del domicilio y se trasladaron a un bar en donde se habían quedado de ver con el amante de Sara. Los tres estuvieron ingiriendo bebidas embriagantes, hasta que durante la madrugada decidieron regresar a su casa y horas más tarde fueron despertados por los trabajadores para informarles que habían encontrado muerta a la magistrada.
Los dos simularon asombro por la mala noticia y llamaron a las autoridades, sin imaginar que desde ese día iba a quedar al descubierto que ellos eran los autores del doble homicidio porque querían quedarse con el dinero de la magistrada y por el coraje que había entre los medios hermanos.
LNY/RadioGrupo
