Las voces desestabilizadoras
GERARDO DE ÁVILA
Creo no exagerar, cuando digo que millones de mexicanos tenemos la impresión de que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, no tiene idea de la dimensión de la crisis política, económica, social y de inseguridad que vive el país y sus efectos adversos en la sociedad mexicana.
Despierte señor presidente.
La desaparición “forzada” de los 43 estudiantes (matanza) de la Escuela Normal de Ayotizinapa, en Iguala, Guerrero es la gota que derramó el vaso. El Gobierno Federal no encuentra cómo explicarle al país y a los padres de familia la barbarie de violencia que se cometió en contra de los jóvenes.
Viene lo peor.
En cambio, en una estrategia equivocada, el presidente acusa que hay “voces desestabilizadoras” que quieren que México no crezca. Alguien en sus cabales le puede decir al mandatario que la nación no está creciendo. Sólo crece la violencia, el desempleo y la irritación social, la economía no.
Las cosas no marchan bien.
A casi dos meses de la desaparición de los 43 estudiantes, tanto padres de familia como la sociedad mexicana están irritados por la falta de resultados en las investigaciones. El Abogado del Estado Jesús Murillo Karam está hecho bolas.
Y cansado, además.
¿Pero quiénes son esas “voces desestabilizadoras” que acusa el presidente? Seguramente para el señor Peña Nieto serán los millones de mexicanas y mexicanos que ya están cansados de tanta y tanta criminalidad que, con la desaparición de los 43 estudiantes el problema tocó fondo.
Las cosas por su nombre.
El presidente se equivoca cuando dice que las “voces desestabilizadoras” son todas aquellas que no quieren que su proyecto (suyo de él) de nación sea exitoso. ¿Quién estará asesorando al mandatario? Quien lo esté haciendo, tampoco tiene idea de la crisis que se vive, que ya son muchas crisis.
¿Cuál proyecto?
Quiso aclarar y desató la ira…
En medio de esta discusión sobre las “voces desestabilizadoras”, la que verdaderamente vino a desestabilizar fue la primera dama de la nación, Angélica Rivera, al tratar de explicar lo de su Casa Blanca de 7 millones de dólares (86 millones de pesos). En redes sociales literalmente la crucificaron.
Esta voz fue desestabilizadora.
Distractores podrán ir y venir muchos, pero Ayotzinapa no podrá borrarse en la memoria de las y los mexicanos. Por si lo anterior fuera poco, la comunidad internacional ha reaccionado repudiando la desaparición de los 43 estudiantes. Tampoco el Gobierno Federal acepta esta realidad.
Nos ven mal, muy mal.
En descargo del presidente –para que no sea vea que somos contreras- tiene una dosis de razón en actuar ante los actos vandálicos del movimiento anarquista, que no es otra cosas que un grupo de jóvenes que han aprovechado la crisis que se vive. Han tomado como pretexto el Caso Ayotzinapa.
No confundirnos.
Juzgue usted. Ahora el discurso del presidente es: “si México quiere ser un país de primer mundo, primero debe tocar fondo. ¿Más? La nueva visión de Peña Nieto es muy debatible, porque entonces desde hace varios lustros hemos vivido en el error.
Se excedió el señor.
Después de Ayorzinapa no quiero saber que será “tocar fondo” como lo expresa el presidente. La realidad es que hay una profunda crisis y el mandatario y quien lo rodea parecen no verla. Y si nos apuramos hay una crisis de crisis. ¿Quiénes son pues las voces desestabilizadoras?
Despierta México.
En suma, ahora, hay quienes piensan que las reformas estructurales tan llevadas y traídas no tendrán éxito si el gobierno peñista no explica y da una respuesta sobre la desaparición de los 43 estudiantes desaparecidos. El desenlace es previsible: lamentablemente los estudiantes parecen estar muertos.
Despierte señor presidente.
Para el anecdotario:
1) Y a propósito del Caso Ayotzinapa, el presidente de Uruguay José Mujica señaló que México parece un Estado fallido, porque pareciera que es más importante la vida de un perro que la de un ser humano. Palabras más palabras menos pero el mandatario uruguayo hizo una severa crítica a lo que está pasando en nuestro país. La autoridad moral y de honestidad del señor presidente Mujica nos hace pensar que son irrefutables sus declaraciones. El tiempo se encargará de decirnos si México es o no un Estado fallido. Obviamente, al Gobierno Federal no le gustó la opinión de Mújica.
• Pero como defender lo indefendible.
2) El fin de semana, nos llegaron una serie de correos electrónicos de zacatecanos preocupados porque la Cervecera Corona de Zacatecas (ahora propiedad de capital belga) sigue despidiendo gente. Si esto es así, nuestras autoridades deben actuar en defensa de los trabajadores y más, porque con el anhelado gasoducto, la empresa en cuestión ha sido la más beneficiada, casi casi lo pusieron ex profeso y pagan de esta manera. ¡¡¡No se vale!!! A ver Secretaria de Economía Patricia Salinas Alatorre hay que actuar, que no le den “gato por libre”, que no le venda espejitos pues.
• Defienda los empleos.
3) Lo que nos faltaba. El Obispo de la Diócesis de Zacatecas Sigifredo Noriega Berceló volvió a armar la polémica en la homilía dominical. El jerarca reconoció que la corruptibilidad ha llegado a la Iglesia Católica. Si esto es así, una de las pocas instituciones que gozan de credibilidad se vería seriamente afectada. Dicho con propiedad, la Iglesia le ha fallado a la sociedad. No hay duda, que el obispo da con frecuencia da la nota mediática como mediático es él. La descomposición social se extiende a la Iglesia.
• En cualquier escenario una noticia preocupante.
Es tan sólo una opinión.
(*) Periodista.
(*) Maestro en Ciencia Política.
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