A 52 días, retumba en Zacatecas: Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
Zacatecas, Zac.- A 52 días de que fueron desaparecidos 43 normalistas de Ayotzinapa, Zacatecas recibió por segunda ocasión a una caravana de padres de familia de los jóvenes mexicanos. La Plaza de Armas fue el escenario.
Tras visitar los estados de Chihuahua y Durango, el contingente arribó la noche del domingo a la Normal Rural Matías Ramos Santos, en el municipio de Loreto, después, fueron miles los estudiantes que respondieron a la convocatoria, y aunque se trataba de un día «de puente», esto no mermó la participación juvenil.
Al acto también acudieron maestros, padres de familia y políticos. Todos para solidarizarse con la lucha de los guerrerenses para encontrar a sus hijos.
Y sí, otra vez el grito de «Vivos se los llevaron, vivos los queremos»!, llenó el Centro Histórico de Zacatecas, en exigencia de justicia, luego de que el 26 de septiembre, los muchachos fueron supuestamente entregados por las policías municipales de Iguala y Cocula, en Guerrero, al crimen organizado.
En esta jornada nacional informativa, los padres de los normalistas, que llegaron a bordo de 11 camiones, rechazaron los avances de la investigación dados recientemente por la Procuraduría General de la República (PGR), respecto a que los jóvenes fueron ejecutados e incinerados por la célula delictiva Guerreros Unidos.
Y ahí, en la Plaza de Armas, frente a un Palacio de Gobierno cerrado, se recordó que el movimiento no se dentendrá hasta que no aparezcan los normalistas, pues ante la serie de irregularidades en la investigación y otras evidencias, la esperanza de que hayan sobrevivido a la violencia de las policías, y en su caso del grupo delictivo, sigue latente.
En este simbólico espacio se hermanaron el magisterio democrático, mineros, campesinos, ex braceros, empleados públicos del gobierno federal, estatal y municipal, telefonistas, del seguro social, de la UTEZ, del Cobaez, del Conalep, de la UPN, de la UAZ y, claro está, de la Normal Rural de San Marcos.
Por su parte, Manuel Domínguez, dirigente del Comité de Acción Política de la Escuela Normal Rural “General Matías Ramos”, aseguró: “Para nosotros no son 43 normalistas desaparecidos, son 43 hermanos desaparecidos”.
Igualmente, el subdirector académico en San Marcos, enfatizó: “Creo que el mismo país ya está al límite de la tolerancia en cuestiones de impunidad y pues no vamos a ser nosotros, de hecho nuestra marcha, nuestras actividades han sido pacíficas, yo creo que la presión que sienten ellos les está llegando al límite también y prefieren utilizar la fuerza a escucharnos y hacer lo que les corresponde”.
Durante el evento, Epifanio Álvarez, padre de Jorge Álvarez Nava, uno de los 43 normalistas desaparecidos, relató que desde el 27 de septiembre “sufrimos mucho, sí, pero nosotros no vamos a parar hasta que nos den a nuestros hijos”.
Y agregó: “El gobierno nos ha ido mintiendo. Primero dijo que en la primer fosa (en Iguala) estaban los 28 cadáveres localizados, que 17 eran de nuestros hijos, cuando eso es mentira. Ya vinieron los peritos argentinos y nos dieron que no hay ni un estudiante ahí. ¿Qué quiere decir eso? Que el gobierno está jugando con el sentimiento de nosotros los padres”.
También denunció que el procurador, Jesús Murillo Karam, se comprometió con ellos, en la víspera del viaje de Enrique Peña Nieto a China y Australia, “que no iba a decir, que no estaba seguro de lo que iba a transmitir en las noticias.
“¿Y entonces por qué salió ahí mostrando todos los videos y diciendo que a nuestros hijos los quemaron con llantas?, ¿qué piensa que somos?, ¿animales?, ¿qué cree que no tenemos corazón, que no sentimos? Pero nos hemos aguantado, vamos a tratar de llegar a un final que podamos solucionar esto como gente, como humanos. Pero si no hay solución habrá revolución, eso sí”.
Epifanio Álvarez abundó ante centenares de personas que lo escucharon en absoluto silencio, en la Plaza de Armas, “yo de mi parte he luchado mucho en estos 50 días que hemos luchado nosotros, buscando a nuestros hijos”.
LNY/Redacción