Tarjeta roja… a las autoridades

GEOVANNA BAÑUELOS DE LA TORRE

La afición futbolera acapara cada vez más la atención del sector femenino. Y cómo no, es el deporte más popular del mundo, el que genera más pasiones, arrebatos, euforia y hasta antagonismos en todos los rincones de nuestro planeta.

La comprensión de este deporte significa entender nuestra cultura actual en todos los aspectos: Sociológico, antropológico, filosófico, psicológico y hasta literario. Juan Villoro afirma que “el juego sucede dos veces, en la cancha y en la mente del público” en su libro “Dios es Redondo” (editorial Planeta).

El futbol se encuentra por encima de la política y la religión. Y gracias al factor del entretenimiento de las masas es un negocio muy redituable.
Según la revista Forbes México, la nómina del 2013 de la Liga MX alcanzó los 84.1 millones de dólares repartida entre 400 jugadores, esto se traduce en siete millones de dólares tan solo en salarios.

En México hay al menos 22 jugadores que ganan más de un millón de dólares anuales. El jugador mejor pagado de la liga MX gana 346 veces más que el mejor salario de un jugador de la liga de Jamaica. En Brasil tiene a seis de los 10 futbolistas con más alto salario en toda América. Para tener estos sueldos, el negocio debe ser redituable.

Muchos jugadores tienen dobles o triples contratos, uno ante la Federación y otro ante el fisco, por aquello de la evasión de impuestos.

Y cómo no va a ser un gran negocio. Para los inversionistas en las telecomunicaciones como Emilio Azcárraga Jean, Ricardo Salinas Pliego y Carlos Slim, cuentan con sus equipos; recientemente Olegario Vázquez Aldir de Grupo Imagen Multimedia acaba de adquirir al Querétaro. Ese interés de los magnates de la comunicación por ser propietarios de equipos de futbol, lo describe acertadamente Juan Villoro de la siguiente manera: “Elegir un equipo es una forma de elegir cómo transcurren los domingos” y “al final siempre gana la televisión”.

Ante el anuncio de la llegada del equipo Mineros a Zacatecas y el desconocimiento por parte del gobierno del estado sobre cuánto costará la franquicia, nos preguntamos si en realidad existe un legítimo compromiso por parte de las autoridades para impulsar el deporte y fomentar la convivencia o si detrás de esta negociación hay una inversión oscura.

Nunca se compra una casa si no conoces el precio, las condiciones del contrato o las condiciones del inmueble. Dicho de otra manera, no te puedes decir gobernador si no sabes gobernar o administrar los recursos públicos. Por tal motivo, es condenable que Miguel Alonso Reyes, asegure que parte del financiamiento para el equipo de futbol será a través de lo que establece la Ley de Fomento a la Inversión, ya que estos recursos deben ser destinado exclusivamente para el beneficio de los zacatecanos.

Es conocido que Carlos Slim Helú, uno de los hombres más ricos del mundo es accionistas del equipo Mineros, y por tanto, cuenta con suficiente capital para que de su propia bolsa salga toda la inversión.

Como dueño de la empresa más grande de telefonía en el país, empresas de construcción, mineras, cadenas de tiendas y restaurantes, debe cambiar su domicilio fiscal al estado de Zacatecas, de esta forma, pagar impuestos a los zacatecanos en retribución a la riqueza que extrae del estado, además, dar solución los conflictos en la mina El Coronel y reparar el daño ecológico y patrimonial causado en Mazapil.

El legislador por el Partido del Trabajo, José Luis Figueroa Rangel, presentó en días pasados un punto de acuerdo para que se revele el documento donde se les darán incentivos fiscales a los inversionistas del equipo Mineros de Zacatecas.

Queda pendiente otro tema en relación al fútbol zacatecano. Hasta el momento las autoridades ocultan los motivos por los cuales se concesionó sin pago alguno el estadio Francisco Villa al diputado panista José Isabel Trejo, quien fue dueño del equipo Águilas Reales y si hubo favores políticos a cambio. Es de todos conocido que el legislador recibe ‘mochada’ a cambio de gestionar recursos federales. Por cierto, el gobierno estatal subsidió a Trejo Reyes, 4.5 millones de pesos el año pasado.

Finalmente, deben informar qué alternativas tendrán los deportistas que acuden cotidianamente al estadio Francisco Villa. ¿Se les dotará de otros espacios? Es claro que en nuestro estado urge infraestructura para la práctica de otras disciplinas.

Si la llegada del equipo Mineros de Zacatecas es para bien de la ciudadanía, entonces envío mi felicitación a la afición zacatecana.
Tarjeta roja a las autoridades por no transparentar información que a todos interesa.

*Comisionada Política del Partido del Trabajo en Zacatecas
[email protected]

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