Renovación en el PRI
JUAN GÓMEZ
Hace más de tres años que el Partido Revolucionario Institucional regresó a gobernar Zacatecas (2010), luego de 12 años de haber perdido el poder. En 1998 los zacatecanos eligieron a un ex priista, Ricardo Monreal Ávila, postulado por el Partido de la Revolución Democrática.
El regreso al poder en el estado del Partido Revolucionario Institucional fue solo mediante una alianza con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza (PNA), porque no tenía la suficiente fuerza electoral para poder ganar la elección en los comicios del 2010.
En la actualidad la alianza que el PRI hizo con el PNA y PVEM está sostenida con alfileres, sobre todo después de la elección intermedia del año pasado, en la que el Verde intentó avanzar electoralmente de manera autónoma y Nueva Alianza fue desdeñado en el registro para coalición en el Instituto Estatal Electoral.
Hoy día el Partido Revolucionario Institucional se prepara para la renovación de su dirigencia, en un escenario en el que no se atisban nuevos liderazgos priistas puros, genuinos de origen, que lo conduzcan hacia los próximos procesos electorales en el 2015 y 2016.
En los próximos meses, quizá en septiembre, Juan Carlos Lozano Martínez dejará la dirigencia del comité directivo estatal del PRI, y este partido político entrará en un proceso de renovación con un nuevo liderazgo, con nuevos cuadros que conduzcan con eficiencia y eficacia la sucesión gubernamental zacatecana.
En el panorama priista en este momento hay dos perfiles que son observados por la militancia partidista: José María González Nava y Francisco Escobedo Villegas. El primero, es actualmente el secretario de Desarrollo Económico del gobierno estatal, pero pesa sobre sus hombros haber sido un militante del Partido de la Revolución Democrática, con cuya postulación fue diputado en la 59 legislatura.
González Nava en sus orígenes de militancia partidista fue un activo del Revolucionario Institucional, pero escuchó el canto de las sirenas que le envío Ricardo Monreal Ávila, y no pidió que lo ataran al mástil del barco perredista, sino que corrió a sus brazos para trascender en la política estatal.
En la actualidad “Chema” González Nava no es plenamente aceptado por los priistas de cepa, quienes tienen serias reticencias para aceptar una imposición más en su dirigencia, lo que además podría generar fisuras en el aparato político que hoy está bajo el control de Juan Carlos Lozano Martínez, el dirigente que ha renovado prácticamente todos los comités estatales del tricolor.
El otro activo priista es el actual secretario general de Gobierno, Francisco Escobedo Villegas, quien logró el triunfo electoral en la presidencia municipal del Teúl de González Ortega durante la administración de Ricardo Monreal, quien no pudo convencerlo de pasarlo a sus filas para fortalecer aquel movimiento de alcaldes que “impulsaban” el proyecto de “Epicentro” a la Presidencia de la República.
Escobedo Villegas se mantuvo firme en las filas del priismo zacatecano que en aquellos momentos era desmantelado por Monreal Ávila, para debilitarlo y fortalecer a un PRD controlado por el entonces gobernador, quien de esa manera veía a distancia consolidar un “Maximato” perredista en Zacatecas.
Por supuesto que González Nava y Escobedo Villegas no son los únicos aspirantes a la dirigencia estatal del tricolor en Zacatecas. Hay más, pero no todos tienen la fuerza de un liderazgo como el que se requiere, puesto que seguramente los priistas desean, anhelan, que un compañero auténtico de sus filas llegue a dirigirlos.
Pero antes, el próximo mes de febrero, el comité estatal tendrá que renovar los liderazgos de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares y el Frente Juvenil Revolucionario, por lo que Guillermo Ulloa Carreón y Enrique Bernaldes Rayas, deberán dejar sendas organizaciones.
Por cierto, Enrique Bernaldez Rayas será jubilado de este sector juvenil (FJR), puesto que se ha eternizado como sucedió en su momento con Otilio Rivera. Ambos rebasaron la edad estatutaria permitida para encabezar dicho sector del PRI, pero al parecer ahora sí, se ha tomado la firme decisión de designar a un nuevo líder o lideresa de las juventudes priistas.
En otros sectores del Revolucionario Institucional no ha habido renovación de sus liderazgos, es el caso del Movimiento Territorial que encabeza Refugio Bautista Romero y la Confederación de Trabajadores de México (CTM) que en Zacatecas lidera el sempiterno Martín Coronado, quien recientemente concluyó su período como regidor de la capital zacatecana.
Otro sector pendiente de cambio en su dirigencia es el Organismo de Mujeres Priistas de Zacatecas que hoy encabeza la actual regidora Yazmín Barrón Ortíz, quien sustituyó en esa responsabilidad a la actual diputada Araceli Guerrero Esquivel.
La renovación de los sectores es el proceso pendiente que tiene en sus manos Juan Carlos Lozano Martínez, y constituye el preámbulo para la cambio del Comité Directivo Estatal del tricolor, la dirigencia que conducirá la transición política en Zacatecas.
Sin duda que el fiel de la balanza es el gobernador Miguel Alonso Reyes, pese a no tener una militancia priista previa a su ascenso al gobierno estatal.
No es cosa menor la renovación en la dirigencia estatal del tricolor zacatecano, puesto que ahí es dónde se registrará el próximo candidato a la gubernatura del estado, pero antes, se postulará a los candidatos a las diputaciones federales en el 2015, el próximo año.
¿Quién sucederá a Juan Carlos Lozano Martínez?
¿Será un priista químicamente puro o un hombre cercano a Miguel Alonso Reyes que prepare el escenario de la sucesión gubernamental y de las próximas elecciones?
Al tiempo.