La Casa de los Perros: Arrancó diciembre y ya son 37 los ejecutados en Zacatecas
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Zacatecas padeció ayer una nueva jornada de violencia. Para desgracia de los que suman y restan en la nueva gobernanza, eso de que vamos bien y avanzando resulta ser una mentira que, aunque quieran contarla mil veces, jamás se convertirá en una verdad. Han perdido credibilidad.
Este arranque del último mes de 2022 ya ha dejado tras de sí, además de narco bloqueos, quema de vehículos de particulares, cientos de llantas ponchadas, una supuesta fuga “fallida” de reos del Cerereso de Cieneguillas y miles de zacatecanos aterrorizados, 37 homicidios dolosos. No son mis cifras, son de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Fue en Fresnillo en donde los hechos de violencia del día iniciaron. Y esta vez la víctima fue el director del Rastro Municipal, Arturo Luna Rojas. Un hombre que además era conocido como un buen taquero y, dicen, mejor amigo.
Él fue asesinado, recibió varios disparos que dejaron su cuerpo inerte a unos pasos de su domicilio y de su puesto en donde cada noche repartía felicidad hecha comida.
Pero también, el gremio de los taxistas ya no siente lo duro, pues en menos de una semana han sido ejecutados tres choferes a bordo de sus unidades en las calles de la capital de Zacatecas y en Guadalupe.
Han sido los conductores de las unidades 548, 203 y 46 a los que les dispararon. Obviamente los agresores huyeron como Juan por su casa y de su paradero no se sabe nada.
Debemos destacar que la unidad 46 fue vista en la manifestación que varios taxistas organizaron. Ellos bloquearon el bulevar López Portillo, a la altura de la Plaza Bicentenario en protesta por la detención de un chofer por supuestos señalamientos de extorsión. Horas más tarde su joven conductor fue ejecutado.
Como tampoco se sabe, hasta hoy, cuántos fueron los reos que supuestamente intentaron huir y que, dijeron, no lo habrían logrado, del Cerereso de Cieneguillas. Tampoco sabemos cuántos fueron los mexicanos afectados durante la noche del domingo cuando el crimen demostró que ellos sí están organizados y que, además, sí son inteligentes.
De lo que sí nos enteramos, pero por los medios locales del vecino Aguascalientes, es que fueron 24 los vecinos del municipio de Cosío los que, al regresar de sus vacaciones en Mazatlán, y tener, han dicho, la mala fortuna de pasar por Zacatecas, fueron bajados de la camioneta en la que viajaban y que los malos explotaron.
Ellos tuvieron que pasar la noche en Fresnillo, recibiendo apoyo no de la autoridad, sino de la misma sociedad, para al día siguiente, muy temprano, “ser rescatados” por un convoy de la 14 Zona Militar que incursionaron a territorio zacatecano para salvar a los suyos.
Las víctimas fueron recibidas en la plaza principal de Cosío, en donde sus familiares los esperaban. Y eso sí, juraron que, por Zacatecas, al menos en unos años, no volverán.
Lo que también sabemos es que este viernes ya arrancaron las malas noticias con el hallazgo de, por lo menos, cinco personas encobijadas que fueron tiradas por el rumbo de la Universidad Tecnológica de Zacatecas.
Así que la invitación es a cuidarse, porque si espera que la autoridad le ayude, anda muy perdido.
Exhortados
En estos momentos en los que, se supone, los integrantes de la LXIV legislatura se encuentran abocados en el análisis del Paquete Económico 2023 que entregó el secretario de Finanzas, Ricardo Olivares Sánchez, el Consejo Directivo del Centro Empresarial de Zacatecas (Coparmex), quiere ser escuchado.
Y lo hacen tomándole la palabra al inquilino de La Casa de los Perros, que ha dicho en repetidas que los asuntos del gobierno también son de la sociedad. Como es el caso del tema de temas: la inseguridad.
Los empresarios de Coparmex urgen entonces a la nueva gobernanza a que inmediatamente tracen el camino para establecer una Agenda de Estado (porque hasta hoy andan dando tumbos) en materia de seguridad, para realizar un diagnóstico sobre el fenómeno que trae aterrorizados a los zacatecanos.
Después de ello, establecer prioridades y líneas de implementación al corto, mediano y largo plazo y, ahí viene lo bueno, entregar los recursos necesarios a través de partidas presupuestales específicas, nada de al ahi se va; y que haya responsables que se pongan a trabajar y den resultados porque hasta hoy, el objetivo urgente de recuperar la paz de los zacatecanos no se ha logrado.
Coparmex decidió entonces estar a la moda y emitieron un exhorto, a los diputados locales para que en la Ley de Ingresos y en el Presupuesto de Egresos del Gobierno del Estado 2023, se modifique o reforme lo que se tenga, para asignar al Fondo de Inversión Pública Productiva del Estado de Zacatecas, 757 millones 202 mil 211 pesos que aparecen para felicidad de la nueva gobernanza, del cobro del Impuesto Sobre Nómina.
Lo ideal es que esta millonada, como lo dice la normatividad, se canalizara “de manera racional y responsable” a resolver necesidades urgentes, pero hasta hoy, del manejo de ese recurso poco, muy pero muy poco se sabe.
Hoy, señala Coparmex en su exhorto, los indicadores demuestran que la planta productiva establecida en Zacatecas “sufre y ha sido severamente afectada por el clima de inseguridad, al mismo tiempo que todos los ciudadanos zacatecanos”, de ahí que la recomendación es que el producto de ese impuesto recaudado a los zacatecanos deje de ser utilizado a contentillo.
Los diputados, expertos en lanzar exhortos, hoy han recibido uno. Veremos hasta dónde son capaces de atender el llamado o lo ignorarán, como todos los días hacen con las incitaciones que ellos desde Tribuna emiten.
Nos leemos el lunes
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