La Casa de los Perros: ¿Oficio Político en Zacatecas? Mejor evitamos la fatiga

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

La LXIV Legislatura sigue su triste paso entre dimes y diretes. Las acusaciones van y vienen en medio de la simulación, la complicidad.

Del oficio político ni hablar, eso, hasta hoy, ninguno de los 30 diputados sabe con qué se come, y menos, obvio, a qué sabe.

Primero fue el avasallamiento de los otros al momento de integrar las comisiones. Los que se dicen oficiales agandallaron todo. Las sobras para los que no comulgan con la 4T.

Los morenos y sus rémoras tenían que hacerlo. No tiene poder de decisión. Su papel es el de obedecer sí o sí. De incumplir, ya saben: a la lista negra de los que dicen gobiernan Zacatecas.

Pero como esto no se acaba, hasta que se acaba, ahora la oposición aprovechó que el diputado del PT, José Luis El Cepillo Figueroa, se encuentra recién operado y convaleciente; que la diputada de Morena, Priscila Benítez tuvo a bien faltar, y que a la suplente de Soralla Bañuelos, no ha podido rendir protesta, para romper el quórum.

Así, sin los diputados del PRIAN presentes y sólo 14 que obedecen a la nueva gobernanza en sus curules, la ratificación de Humbelina López Loera quedó, otra vez, en veremos.

Será este martes próximo cuando, ahora sí, se lea en la Máxima Tribuna el dictamen que, en positivo, reconoce la trayectoria y profesionalismo de la zacatecana, y así sea el jueves cuando concluya este largo trajinar para que la 4T tenga por fin a su secretaria de la Función Pública con todas las atribuciones que la ley le otorga.

Pero como en Zacatecas todo lo malo no ha terminado de suceder, ahora viene la discusión del Paquete Económico 2022.

Los diputados tienen como plazo, supuestamente, porque para ellos las leyes y reglamentos no tienen la menor importancia, hasta el 31 de diciembre para aprobarlo, pero como se ven las cosas, definitivamente lo peor está por venir.

La cuestión es que tampoco se pueden achacar todos los males a los 30 diputados que, desde un principio, no supieron darse a respetar como un poder autónomo del Ejecutivo.

Porque a Arturo Nahle García y el resto de los magistrados del Poder Judicial nadie se atreve a decirles ni mi alma. Ellos, con un animal político como presidente, actúan sin presiones ni mandatos externos. Como debe ser.

Pero la LXIV Legislatura, con una endeble mayoría, es ninguneada por una nueva gobernanza que, de entrada, tiene prohibido a los funcionarios de todos los niveles entablar un diálogo con cualquier sector sin tener la «autorización» de Gabriela Pinedo Morales, la secretaria general de Gobierno.

En las reuniones de gabinete, esas que son ultrarecontrasecretas, la cantaleta es siempre la misma: Ni entrevistas con los medios de comunicación, ni contacto alguno con los diputados, ni tampoco relación con nadie que se haya atrevido a no apoyar a David Monreal en su camino a La Casa de los Perros.

Si alguno llegara a desobedecer ya sabe, no cargará los peregrinos este diciembre. Punto.

Por eso los secretarios en el nuevo gobierno deambulan como zombis sin ningún poder de decisión. Si no les permitieron ni elegir a sus secretarios particulares, mucho menos emprender acciones que traigan, de verdad, ese bienestar que tanto presumen en el papel los de la 4T, pero que en la realidad no existe.

Y como el hueso, es el hueso, preferible ser un cero a la izquierda que quedarse en la banca seis años. Eso jamás.

Además, si es bien fácil «gobernar» desde Facebook, para que hacer un esfuerzo mayor. Aquí todos son Jaimito, el oriundo de Tangamandapio, porque siguen su premisa: evitar la fatiga…

Luego se preguntan por qué hoy Zacatecas es el hazmerreír de México. Por qué nada funciona. Por qué la entidad es la nota roja nacional todos los días. Por qué la tristeza que transmite su imagen institucional ha trascendido a sus habitantes que no ven la suya. Y sólo van dos meses de gobierno…

Avanza elección panista

Dos mujeres zacatecanas, a partir de hoy, lucharán por ser la nueva dirigente estatal del Partido Acción Nacional.

Una es María Teresa López García, quien, con una larga trayectoria en el blanquiazul, ha dicho irá en contra de aquellos que, enquistados en el Comité Ejecutivo Estatal, se han repartido candidaturas, regidurías, sindicaturas, alcaldías y diputaciones, sin dejar que extraños se atrevan siquiera a saborear las mieles que chorrean de vivir del erario.

Ella estará acompañada por Sergio Leaños Lamas, como secretario general; y Alma de León, Álvaro Zaldívar, David Rodríguez, José Carlos Aguilar, Rosalva Rodríguez, Leticia García y María del Carmen Marín, como integrantes de la planilla.

Del otro lado está Verónica Alamillo Ortiz, quien llega con la bendición de la actual presidenta y diputada federal Noemí Luna Ayala, y del también diputado federal Miguel Varela Pinedo.

Ella recibió un sinnúmero de críticas cuando fue dirigente municipal del PAN en su natal Jerez.

Hoy, los casi tres mil 500 militantes activos, los mismos que recibirán su playera tipo polo personalizada de parte del legislador federal Miguel Varela, esperan que, de ganar, ahora sí haga un buen trabajo.

Alamillo Ortiz va a la elección interna con el exalcalde de Calera, y candidato perdedor a la diputación local, Reynaldo Delgadillo Moreno, como secretario general.

Están en la planilla también Ma. del Refugio Sánchez, el propio Miguel Varela, María Patricia Molina, Guillermo Flores (esposo de la dirigente estatal), Laura Becerra (quien no consiguió las firmas necesarias para ser candidata), Rafael Jiménez y Diana Carreón.

Nos vemos el lunes
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