La Casa de los Perros: Listo ejército de la 4T en Zacatecas para cumplir capricho de López Obrador

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

Las prioridades de la 4T en Zacatecas no giran en torno a la seguridad de los zacatecanos, o a su salud, educación o bienestar. Eso bien puede esperar para otro día, con más calmita.

El pasado sábado, cuando los millonarios pagos a asesores que funcionarios como la secretaria de Gobierno, Gabriela Pinedo Morales; el secretario del Campo, Jesús Padilla Estrada; la secretaria del Medio Ambiente, Susana Rodríguez, y el director de Catastro, Héctor Menchaca dispersaron cuando eran diputados, le estallaba en la cara a la nueva gobernanza, la prelación era otra.

En uno de los salones del Hotel Don Miguel –propiedad de la familia de la subsecretaria de Promoción Turística–, alcaldes de Morena, acompañados de síndicos y regidores y un buen número de servidores de la Nación se reunieron con los coordinadores regionales para armar el entramado que sostendrá la revocación de mandato que quiere el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y es que las alarmas se prendieron en Zacatecas luego de que se dieron a conocer resultados de encuestas que dejan muy mal parados a López Obrador, y al mismo inquilino de La Casa de los Perros.

Según Consulta Mitofsky, el presidente de la República tuvo en Zacatecas el 56.3 por ciento de aprobación durante octubre, cuando hay estados como Tabasco o Campeche en donde las cifras superan el 80 por ciento. Aunque hay otros como Durango, Guanajuato, Nuevo León, Jalisco o Querétaro en donde no alcanza, ni por equivocación, el 50 por ciento.

Para David Monreal Ávila las cosas pintan peor. Los datos de México Elige dan cuenta que con el 34.5 por ciento de aprobación. El de Fresnillo no solo bajó un lugar en el ranking de gobernadores, sino que además sólo están por debajo de su lugar 30, de 32 mandatarios estatales, el del Estado de México, Alfredo del Mazo, y el de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo. Bonita la cosa.

Por eso, en calidad de urgente, se convocó a la reunión –sin celular– en la que se dictaron metas para conseguir las preciadas firmas que harán posible que el 27 de marzo del 2022 se lleve a cabo el millonario ejercicio en el que los mexicanos dirán si quieren que el presidente se mantenga viviendo en Palacio Nacional o mejor se va a La Chingada, en Tabasco.

Para que se lleve a cabo esta consulta se requiere que al menos 17 entidades la validen y se alcance el 3 por ciento de la lista nominal del INE, algo así como tres millones de firmas.

En Zacatecas, con 46 mil firmas se puede declarar que la misión ha sido cumplida, pero no, a los alcaldes, síndicos, regidores y esclavos de la Nación se les dijo que van por 120 mil rúbricas. Ni más, ni menos.

El INE aprobó el registro en Zacatecas de 65 promotores entre los que se encuentran desde el exalcalde Ulises Mejía Haro, hasta el exdiputado Omar Carrera. Pero ellos están en el otro bando. Los que traen el apoyo de la Delegación de Programas Sociales son los que juraron en la reunión del Hotel Don Miguel, con una foto de López Obrador en su bolsillo, que no habrá sangre, ni sudor, ni mucho menos lágrima que no derramen para alcanzar el objetivo. ¡Faltaba más!

Lo que nadie sabe es de dónde saldrán los recursos para que el ejército que conforma la estructura para la revocación de mandato trabaje y se mueva por todo el estado para cumplir el capricho de su máximo líder.

Ni los ven ni los oyen

Mientras David Monreal, como “resultado de gestiones” logró la donación de equipo médico por 60 millones de pesos de la asociación médica estadounidense Globus Relief, para hospitales comunitarios del estado, el de la Mujer y los Generales de Zacatecas y Fresnillo, contactada a través de la Federación Mexicanos Unidos de Utah y de su presidente, Salvador Lazalde, “un zacatecano solidario y comprometido con esta entidad”, en el Congreso del Estado, el diputado José Juan Estrada Hernández reiteró su postura de mantener la Secretaría del Zacatecano Migrante en el organigrama del Poder Ejecutivo.

El tema de los migrantes, y el hecho de que a casi dos meses de que la nueva gobernanza llegara a Zacatecas y la Secretaría que los atiende siga en el limbo, se encuentran estancados, como muchos tópicos que parecieran ni siquiera quitarle el sueño al gobernador David Monreal Ávila.

En el evento efectuado en Guadalupe, su municipio favorito, Monreal Ávila se desvivió en halagos a los migrantes zacatecanos, pero ni por equivocación aprovechó el momento para dar certeza a la instancia gubernamental que, como lo remarcó Estrada Hernández, es el canal adecuado para fortalecer, implementar las políticas públicas a favor de los que emigran al exterior, y acercar la atención y servicios de las instituciones estatales de manera organizada y eficaz a esa mitad de la población de Zacatecas.

La existencia de la Secretaría del Zacatecano Migrante dentro de la administración pública estatal es, dijo el priista, una muestra de buena voluntad y un reconocimiento a las organizaciones de migrantes por su labor incansable en beneficio de sus comunidades de origen. Y claro, un estímulo para continuar con el esfuerzo a favor de Zacatecas.

Ahí la llevan

A muchos ciudadanos no les gusta eso del chapulineo, en realidad es una práctica fea relacionada casi siempre con acomodaticios. Pero lo decía Immanuel Kant, y lo decía bien, el sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca.

En Zacatecas, los casos de políticos que cambian de partido según sus conveniencias personales, porque lo hacen a título personal, no buscando el bien de la sociedad, eso es un discurso que ya pocos compran, se cuentan por montones. Se podría decir que es ya cosa de todos los días.

Un caso simbólico es justamente el del senador Ricardo Monreal Ávila. Era priista, se mudó al PRD cuando le negaron la oportunidad de ser candidato a gobernador. Después se paseó por el Partido del Trabajo, Movimiento Ciudadano y ahora su militancia en Morena pende de un hilo.

Su convicción ideológica ha dependido, depende y dependerá del poder acceder a un cargo público. Nada más.

Y como él, muchos más que, por ejemplo, hoy, presumen a los cuatro vientos que ya se saben la tonada naranja de Yuawi.

El expriista Marco Vinicio Flores, ya con un pie en la dirigencia estatal de Movimiento Ciudadano que dejaría Felipe Álvarez Calderón, tras un acuerdo con el dueño del partido Dante Delgado Rannauro, se encuentra feliz porque en los cuatro distritos federales de Zacatecas ya tienen delegados listos para su Convención Estatal a realizarse el próximo 21 de noviembre, en la que él sería ungido como el bueno.

Y con él trabajarán Cuauhtémoc Calderón Galván, Enrique Laviada, Ana María Romo Fonseca y Juan Francisco del Real. Todos ellos sabían bien que quedarse en sus institutos políticos ya no era opción. Sería, efectivamente muy necio aferrarse a un lugar en el que ya no eran bienvenidos. Aquí entrarán a la repartición de cargos y próximas candidaturas sin tanto aspaviento.

Y todo porque, dicen, el movimiento naranja es la nueva opción.

Audiencias públicas

El alcalde de Zacatecas, Jorge Miranda Castro, arranca hoy un nuevo programa: Menos escritorio más territorio, que no es otra cosa que las recurridas audiencias públicas en las comunidades y colonias de la capital.

En el parque El Orito Primera Sección será la cita, a partir de las 12:00 del día, en donde no sólo estará el presidente municipal listo para atender a la población, sino los secretarios que deberán poner su mejor cara a los ciudadanos que acudan con sus peticiones.

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