Un proceso terrible y violento

RAÚL MANDUJANO SERRANO

Hace unos días, la actriz Laisha Wilkins reclamó a seguidores de Dolores Padierna, candidata de Morena a alcaldesa de Cuauhtémoc, que estuvieran colocando propaganda encima de la publicidad de otra aspirante, la respuesta de uno de los sujetos que lo hacía fue una agresión física en su agravio. Y nos cansamos de hablar de la violencia de género…

También apenas, Gregorio Gómez Martínez, candidato del PRD a la alcaldía de Tihuatlán, en Veracruz, fue secuestrado al salir de su casa; en abril, le ocurrió lo mismo al candidato independiente por la alcaldía de Palmar de Bravo, en Puebla, Ángel Morales Ugalde; Igualmente al dirigente del Partido Verde, en el municipio de Cortázar, Guanajuato, Luis Enrique Torres; y apenas en mayo, Milton Martínez, candidato a regidor en Bahía de Banderas, Nayarit, quien además fue torturado.

Lo que ocurre es terrible. Este proceso electoral, se ha convertido ya, en la segunda elección más violenta en la historia del país. Desde su inicio, a la fecha, se tienen registrados 68 asesinatos contra políticos o funcionarios de gobierno, sólo por debajo de la elección de 2018, cuando el número de muertos era de 84. Le hablo de datos publicados por el observatorio de Violencia Política en México, quien refiere que hace tres años, en el mismo periodo, ya habían muerto 28 aspirantes a puestos de elección popular. En el actual, hasta el 13 de abril pasado, iban 21 (cinco de ellos ya tenían el registro como candidatos).

El amanuense hace referencia también al reporte de Integralia Consultores, que contabiliza 137 agresiones en contra de funcionarios públicos en activo, exfuncionarios, candidatos, periodistas y activistas, esto, de septiembre de 2020 a marzo de 2021, incidentes de violencia política que han dejado 179 víctimas, de las cuales 118 fueron mortales.

En el Edomex, y de acuerdo con el Instituto Estatal Electoral, suman ya 130 quejas por actos anticipados, uso indebido de recursos públicos, promoción personalizada anticipada y violencia política de género, agresiones físicas y destrucción de propaganda. Recordemos que los candidatos a diputados locales y presidencias municipales de Toluca, Xonacatlán, Metepec y Ecatepec denunciaron agresiones por parte de grupos contrarios que ponen en peligro a sus equipos.

Me parece –insiste el periodista- que el verdadero peligro para la ciudadanía está los partidos políticos, al menos en muchos de sus candidatos y feroces seguidores, que nos dejan un ejemplo de lo que no debería ocurrir, que se pasan por las “patas” la civilidad, a cambio de un trozo de poder…

Colofón. – El monstruo de Atizapán 

El 8 de octubre de 2017, fue encontrado en el interior de su departamento de la calle Mosqueta, en la ciudad de México, José Luis Calva Zepeda -quien se proclamaba escritor, dramaturgo, y poeta mexicano-, junto al cuerpo mutilado de su novia, a quien confesó haber asesinado. Se le atribuyen 8 crímenes más de mujeres a las que este caníbal se comía; un año después, en octubre de 2018, fueron capturados Juan Carlos Hernández Bejar y Patricia Martínez Bernal, conocidos como los monstruos de Ecatepec o los feminicidas de Jardines de Morelos, acusados de al menos 10 crímenes contra mujeres, a las que el sujeto asesinaba por el simple hecho de ser mujeres.

Ahora, en Atizapán, fue capturado Andrés “N”, de 72 años, quien era investigado por el feminicidio de una mujer de 34 años. La sorpresa fue que, en su domicilio, ubicado en la colonia Lomas de San Miguel, no sólo hallaron los restos desmembrados de la víctima, sino también restos óseos de otras mujeres. Un caso del que hablaremos la siguiente semana. Cuídense por favor.

Twitter: @raulmanduj