Si extorsioné a minera Newmont GoldCorp que presenten pruebas y me demanden: José Narro

Ciudad de México.- El senador José Narro Céspedes se presentó en las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), para exigir a la minera estadounidense y canadiense, Newmont GoldCorp, dueña de la mina de El Peñasquito, ubicada en Mazapil, Zacatecas, que presente las pruebas de la supuesta extorsión de la que dijo fue objeto por parte del legislador, acción que la empresa denunció a través de desplegados publicados en diarios de circulación nacional.

La minera acusa que “les estamos pidiendo 442 millones de dólares y nadie está pidiendo esa cantidad, ni los ejidatarios ni las comunidades afectadas por la minera, ni tampoco los transportistas, y si no nos acusan de extorsión, entonces ellos están encubriendo un delito federal”, dijo.

Narro Céspedes dijo son dos demandas, una penal y una civil, por el tema de daño moral, “porque están acostumbrados a la impunidad, creen que todo lo resuelven con sus dólares y su oro, aquí van a tener que acudir a la justicia y aclarar las mentiras, las calumnias y la difamación en la que han convertido su proceder”.

El senador informó que la mina afecta la tierra y el agua de cerca de 30 comunidades de Mazapil, más de 50 mil hectáreas del semidesierto de Zacatecas, mientras que firmó un Acuerdo de Ocupación Temporal con cuatro de ellas: Cedros, Cerro Gordo, El Vergel y Matamoros, en donde “ocupan la tierra y el agua de estos ejidos”.

Así, el legislador denunció que la mina ha ocasionado un gran daño ecológico, toda vez que, para procesar una tonelada de tierra, utilizan una tonelada de agua, además de utilizar metales pesados que dejan contaminantes en la tierra y en el agua, lo que produce graves problemas de salud.

“Los contaminantes han hecho la tierra como plastilina, que no sirve para la agricultura, la ganadería o para la actividad forestal”, aseguró.

Informó que desde hace 30 días “compañeros de las comunidades aledañas y afectadas por la minera Peñasquito, propiedad de las empresas estadounidense y canadiense, Newmont  GoldCorp, tomaron las instalaciones de la mina para protestar porque desde hace siete años, las actividades mineras han provocado graves problemas con el agua.

Además, por la contratación de una empresa española, Peñasquito, desde hace un año y cuatro meses, dejó sin trabajo a 250 transportistas de regional CAVA, misma que contrató como parte de los acuerdos de Ocupación Temporal para el movimiento de las 130 mil toneladas de tierras que la mina mueve diariamente.

Narro Céspedes comentó que los transportistas de CAVA llevan más de un año y cuatro meses esperando una solución a su conflicto, en donde “innumerables veces fueron a buscar al gobierno estatal y nunca los atendieron, nunca hubo respuesta, ni para el problema del agua, ni para el problema de la contaminación del suelo y la destrucción de la capa vegetal, prácticamente todo fue devastado por la mina”.

LNY/Redacción

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