La Casa de los Perros: De definiciones, malqueridas y fichitas
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Definido
Finalmente, después de tantos jaloneos, el sábado por la madrugada se acordó que Clemente Velázquez Medellín sea el candidato que postulará Morena para ganar la presidencia municipal de Guadalupe.
En reunión con los aspirantes se mostraron los resultados de la encuesta aplicada ex profeso, siendo así que Clemente logró el 24 por ciento de aceptación, seguido por Priscila Benítez, con el 10%, Carlos Salmon el 8% y “Lolo” apenas el 6%.
El acuerdo fue claro, el primer lugar de las preferencias iría a buscar la alcaldía, el segundo y tercero a los distritos. Todo quedó amarrado y se fueron a dormir ya con el acuerdo firmado, sin embargo, alguien le calentó la cabeza a Carlos Salmón, quien el domingo pidió realizar otra encuesta, o las que fueran necesarias, hasta que él apareciera en primer lugar. Claro que se le llamó a la razón, y ya hoy lunes las aguas parecen calmas.
Malquerida
A pesar de que, poco a poco en Morena han ido construyendo las candidaturas, han saltado los prietitos en el arroz, siendo en Morelos donde las aguas parecen estar en oleaje alto. Y es que un grupo de militantes aseguran que la intención es eliminar de la lista, ya publicada en el portal del partido, a Silvia Veyna Ureño, para poner en su lugar a Adriana Carrera Martínez, esposa del actual presidente municipal y hasta hace unas días priista convencida y fan de Enrique Peña Nieto.
Y es que, el gobierno de Horacio Franco se ha distinguido por los escándalos, los abusos de poder, los fraudes a la ciudadanía, las tropelías y la corrupción rampante, de ahí que las ligas con este tipo de personajes no le va bien a ningún partido político. Hay, como dicen, sumas que restan, y el solo presentar como una opción a Adriana Carrera basta para que los habitantes de Morelos salgan huyendo.
En el PRI, Adriana Carrera fue hecha a un lado, pues tanto el dirigente estatal, Adolfo Bonilla, como el propio candidato a gobernador, Alejandro Tello, buscan candidaturas que no sean cuestionadas por ningún motivo, y el cargar ese muertito no está en sus planes.
Pero, se sabe, la “primera dama” de Morelos tampoco estaría en el proyecto de Morena, ya que también David Monreal no quiere problemas gratuitos con una persona que en lugar de votos, trae consigo deudas y malos tratos para los de la región.
Fichitas
Hoy en día, el término “luchador social” está muy, pero muy devaluado. Y es que cuando uno observa a personajes como Efraín Arteaga Domínguez, que están un día sí y el otro también en la Secretaría General de Gobierno, a donde asegura ir a hacer «gestiones» para apoyar a los ex braceros que aún sobreviven, pero que siempre se le ve salir con un sobre en la mano, el cual entrega de manera pronta a las cajeras de Banamex, la pregunta es obligada ¿Con qué calidad moral piensa acudir a pedir el voto a los zacatecanos?
Alguien seguramente revisó su expediente y decidieron eliminarlo de la lista de candidato a síndico de la capital de Zacatecas (iría en mancuerna con Soledad Luévano), en la que fue incluido por gestiones del propio dirigente estatal, Fernando Arteaga, y Luis El Oso Medina Lizalde, luego que la suerte –o la justicia divina–, le jugó una mala pasada y su nombre no salió entre los afortunados a diputados plurinominales, de esa magnífica tómbola.
Al percatarse que había sido borrado, de inmediato se lanzó en las redes sociales a despotricar contra quien se le pusiera enfrente, lo malo, para Morena, es que encontró de inmediato a quien apareció como candidato a síndico, nada menos que el ex priista José Luis González Orozco, quien recién se integró al equipo de Carlos Salmón, en la asociación Rescatemos Zacatecas.
El sujeto de marras resultó, igualmente, una fichita, al que de manera vergonzosa despidió el alcalde con licencia y actual candidato a diputado por el PRI, Carlos Peña Badillo.
Tanto en la actual administración, como en la del pasado presidente municipal, Arnoldo Rodríguez, fungió como titular del Departamento de Inspección y Ejecución Fiscal, pero comerciantes y trabajadores del área acudieron a la Contraloría Municipal, a denunciar extorsiones por parte de González Orozco.
Maricela Riva Palacio llevó a cabo una auditoría a esa área, del ejercicio del 2014, y al final fue tanto lo que se le encontró a José Luis Orozco, que se hablaba hasta de inhabilitarlo y presentar una denuncia penal en su contra. Como siempre sucede en este país, todo quedó en amague y ahora el socio del otrora restaurante y bar La Chopería, que fue cerrado en esta administración municipal, regresa por sus fueros, pero arropado por Morena. Sea por Dios.
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