Manifestaciones: ¿Legales o legítimas?
RAÚL MANDUJANO SERRANO
Manifestaciones: ¿legales o legítimas?
No son legales, legítimas si, pero, habría que reflexionar. El hacedor de las alegorías sotaneras lee la carta dirigida a Miguel Ángel Mancera Espinoza. Jefe de Gobierno del Distrito Federal, en la que las organizaciones de izquierda: Cauce Ciudadano, Centro de Derechos Humanos, el Centro Nacional de Comunicación Social, la Fundación para la Democracia Alternativa y el Debate y la Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Dialogo, le exigen que en todas las manifestaciones de diciembre se corrijan las formas de acción violenta de las policías y se garantice el ejercicio del derecho a expresarse socialmente. Pero ¿qué debemos entender de esto?
Antes de usar el término de criminalización de las manifestaciones o victimizarse por la supuesta represión policial, habría que considerar algunos elementos establecidos en la Ley de Manifestaciones en el Distrito Federal, como son la prohibición del “bloqueo total” de vialidades primarias así como de calles de un solo carril; que se realicen entre las 11 y 18 horas; garantizar el derecho de asociación y reunión, pero sólo con un “objeto lícito” o que no sea contrario a las “buenas costumbres”; prohíbe proferir insultos o amenazas; plantea la prohibición o modificación de manifestaciones en función de la contaminación ambiental y del “factor de riesgo de protección civil” y permite a la autoridad “disolverlas” si se bloquean vialidades o se atenta contra edificios públicos, privados o instalaciones de carácter histórico.
En la ordenanza aprobada por los legisladores defeños, la pregunta sería ¿de estos puntos cuántos son respetados por los manifestantes y en cuántos de ellos debe aplicarse la normatividad constitucional? En todo el país pronunciarse por causas justas es un derecho, no hacerlo también. El mismo periodista participaría en ellas a partir del origen de justicia pero desafortunadamente eso, lo justo, es lo último que se considera. Detrás de un planteamiento cívico ordenado, está el involucramiento de agentes del caos, desestabilizadores sociales que camuflajeados en las motivas de justicia atentan contra todo lo que está prohibido. Pero no confundamos el término de prohibición por el de control. No se impide la expresión sino el atentar contra quienes no piensan igual. El respeto al derecho ajeno es un valor perdido, pero es la máxima histórica de un mexicano que gobernó al país y que presumimos por doquier, cuando nos conviene.
Si para unos Peña miente, si la Gaviota es perversa, si los gobiernos son corruptos, si el PRD o el PAN son aliados y si Morena cree ser la absolución del pecado, es su opinión y así se valora. Cada quien tiene un punto de vista, la defensa de la sociedad no parte sólo de la visión de unos cuantos o de esos que no escuchan pero amenazan y agreden, sino desde la perspectiva conjunta de quienes aman a su país por encima de un falso Mesías. Lograr la unidad está cabrón, menos aún cuando el respeto a la libertad de pensamiento y decisión, sean una simple falacia oculta en el anarquismo y la mentira sea una bandera con la que caminan muchos. Lo más lamentable es que estas exacerbaciones ocurran previas a la realización de elecciones políticas… Ni que decir.
Colofón: Disputa el crimen organizado la plaza de Otzoloapan
En esta ocasión no hay platillos a degustar. El periodista hace un llamado a las autoridades, federales, estatales, locales, a quien sea… El fin de semana, en las comunidades de Cruz Blanca y San Miguel, en el municipio de Otzoloapan, el crimen organizado, los bandos de “guerreros unidos” y “caballeros templarios” se enfrentaron. Primero incomunicaron a ambas poblaciones al dejarlas sin luz, luego se balearon por ocupar la plaza de Santo Tomas, Zacatepec y Otozoloapan, que según dicen tiene su centro de control en el perímetro de San Miguel, Cruz Blanca, Estancia Chica y Llano Grande. La gente no salió, no pudieron trabajar, no fueron a la escuela y quedaron encerrados en sus hogares, aterrorizados, acobardados, sin saber qué hacer. Una sola patrulla de la policía no se avizoró. Los impactos de las balas retumbaban con eco en el aire. En los medios no se habla nada de estas escenas de violencia, terror y muerte en territorio mexiquense, quizá porque es más fácil entenderlas en Michoacán y Guerrero, Tamaulipas o Chihuahua, en todos lados menos de aquí… Ojo, desde hace meses estos grupos incursionan en el estado de México… Y nadie, hace, nada…
Susurros: Los informes por bien, sólo Zinacantepec con problemas
Susurran en el estado de México, en toda la entidad, que los informes de acciones de los alcaldes se llenaron más de actividades de relumbrón que de impacto benéfico a la ciudadanía, aunque se podrían decir que cumplieron, a medias pero cumplieron. Las zonas indígenas siguen siendo el tema descuidado de los ayuntamientos del Valle de Toluca y en Zinacantepec, del que no se ve mucho trabajo, ahí si hubo problemas pues la alcaldesa sufrió la incursión de un grupo afín a Morena que le exigió cumpliera a la gente…
La del estribo: Las tareas de Salvador Rodríguez
En sus buenos tiempos de estudiante, Chava Rodríguez, comunicólogo de estirpe certificada y tallada en los pupitres de distintos salones de la UVM, decidió llamar por teléfono a su profesora a las 02:30 de la madrugada: “Hola profe ¿está dormida?”. Si Chava, ya estoy dormida… “Tan linda hija de la chingada y uno aquí haciendo tareas”… Hasta otro Sótano.
Twitter: @raulmanduj
