Lealtad del Ejército le ha dado destino a la vida política en México

Por Benny Díaz

Aguascalientes, Ags.- En punto de las 10:00 horas el gobernador Carlos Lozano de la Torre, de la mano de su esposa Blanca Rivera Río, colaboradores y autoridades civiles y militares, así como de un descendiente de la guardia que acompañó a Francisco I. Madero, hace cien años en la Marcha de la Lealtad, para dar inicio a la conmemoración de la misma con el izamiento a la bandera.

Luego todos se trasladaron a la calle Morelos esquina con Avenida Madero para dar inicio a la marcha; 20 minutos después estaban en el segundo patio de Palacio de Gobierno, en donde se dedicaron unas palabras para recordar los acontecimientos del 9 de febrero de 1913, cuando  Francisco I. Madero dispuso la reorganización del Ejército y parte del proyecto era armar perfectamente a la milicia, fue traicionado por algunos, pero defendido por otros militares leales a su gobierno.

Un siglo después, Carlos Lozano de la Torre reconoció en la lealtad el camino que le ha dado sentido y destino a la vida política y militar de México, y un valor permanente que proporciona rumbo y certidumbre.

En su discurso dijo: “La lealtad es un principio que es característico del ejército Mexicano y por ello mismo tengo afecto y reconocimiento de toda mi vida a las fuerzas armadas, que tienen como base fundamental la lealtad”, externó.

El orador oficial en el evento fue Javier Aguilera García, jefe de gabinete, quien dijo: “La lealtad es de todos y para con todos; con su vigencia, la marcha que hoy celebramos nos nutre y fortalece, Francisco I. Madero nos enseñó hace cien años que no debemos darnos por vencido ante nada, por lo que en la actualidad debemos buscar superar la adversidad siendo leales a México, a sus instituciones y a sus leyes”.

Luego hizo uso de la palabra el comandante coronel de Estado Mayor Presidencial, Bernardo Añorve Lazos, a nombre de la comandancia de la XIV Zona Militar, quien puntualizó que quien es desleal ofende a la Patria y avergüenza a sus seres queridos. Quien es leal posee el mejor acervo moral mientras que la deslealtad carcome cimientos y mancilla convicciones.

“Cuando las ambiciones egoístas y alevosas prevalecen, no sólo la lealtad está ausente, sino todo rasgo de conducta ética. Aquellos que han equivocado el camino y no tienen arraigada la lealtad se encuentran pagando las consecuencias de su desatinada decisión”, dijo.

La sorpresa del evento fue la presencia de Humberto Chávez de Loza, quien es descendiente del cadete Abel Chávez, quien fuera integrante de la guardia que acompañó a Francisco I. Madero el 9 de febrero de 1913 para defender su gobierno de los traidores.

Chávez de Loza dijo sentirse orgulloso de llevar la sangre de un valiente, que, sin importarle su vida, demostró su lealtad hacia el entonces presidente de México.

“Debemos ser leales a nuestros principios y convicciones, sólo así honraremos a quienes nos dieron patria y libertad; respaldemos a las instituciones para ser cada día esos mexicanos que reclama y necesita México para levantarse y seguir adelante; no defraudemos el sueño de nuestros antepasados que ofrendaron su vida para ahora tengamos un país libre, pero que necesita de muchos valores, no sólo de la lealtad, para poder convertirse en un gigante que compita de igual a igual con todos los países en progreso”, concluyó.

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