¿Por qué apoyar el presupuesto que propone Miguel Alonso?
El pasado miércoles 30 de noviembre, por la tarde y sin mayor evento protocolario, el Ejecutivo del Estado envió, por conducto del secretario de finanzas, su propuesta de Paquete Económico para el 2012. Hace un par de días, en el Congreso del Estado, señalé que aunque era perfectible (y es el reto que tenemos los legisladores) me parecía una muy buena propuesta como punto de partida.
A continuación, desglosaré mis argumentos de acuerdo a los principales temas:
Campo. Para mi gusto no hay ningún tema de mayor relevancia para Zacatecas, en términos económicos, que el tema del campo. En lo personal creo que todos los cálculos públicos por los daños de la sequía se han quedado cortos.
Nuestro estado es uno de los que tienen mayor concentración en zonas rurales, en actividades económicas del sector primario y de los que menos empleo “formal” han registrado históricamente.
Pues bien. Esa es la primera buena noticia del Paquete Económico que el gobernador Miguel Alonso ha enviado: el presupuesto al campo crece en un 47.7% (a más de mil 000 millones de pesos) y prácticamente todo ese incremento se debe a la aportación estatal que pasaría de 268 millones de pesos en el 2011 a 589 millones en el 2012. Es decir, la aportación estatal para el campo estaría creciendo en un 119%.
Entiendo que a algunos les ofenda que Miguel Alonso incremente en un 119% el compromiso presupuestal de su gobierno hacia el campo, al tiempo que solo decidió proponer un aumento del 3.5%. No es mi caso.
Tenencia. Otro asunto polémico que el Paquete Económico del 2012 tenía que sortear era el asunto de la tenencia que, para el caso federal, desaparecerá a partir del año próximo.
La decisión no era sencilla: la tenencia, como todos los impuestos, es muy impopular y muchos sectores se habían pronunciado por su desaparición. Por el contrario, es un ingreso sustantivo del Gobierno del Estado (que solo tiene 4% de ingresos propios) y que tiene la “ventaja” de afectar más a quien más recursos tiene (a quien posee un automóvil de mayor valor, se le cobra más).
Pues bien, creo que la solución ha sido óptima. Por un lado, el cobro desaparecerá para aquellos ciudadanos que cumplan con el resto de sus obligaciones fiscales y tengan un automóvil cuyo valor facturado esté por debajo de los 200 mil pesos; es decir que el 95% del parque vehicular del estado estaría exento de su pago.
Por el otro, para evitar la “chatarrización” (que prevalezcan los automóviles viejos y obsoletos) este año se pondrá en marcha un programa de verificación vehicular que los propios diputados aprobamos y propusimos al Ejecutivo. Es decir; se resuelve el tema de los ingresos, se aplica un criterio re-distributivo (pagará quien más tiene) y se complementa con un compromiso ambiental.
Gasto corriente y deuda. Estos dos temas son los que realmente deben preocuparnos que se corrijan en el corto plazo.
En cuanto al gasto corriente, éste ha tenido una evolución desastrosa en los últimos años, según documentan el PNUD y el CIDE en el documento “México Evalúa” que ya hemos abordado aquí.
En el 2011, el gobierno estatal presentó un círculo vicioso: no tenía para pagar indemnizaciones y estaba asfixiado por la nómina. El propio Alejandro Tello reconoce que este es uno de los temas en el que menos se ha avanzado.
Sin embargo, en la propuesta para el 2012 se consideran partidas que garantizan la reducción gradual del gasto corriente. Tal es el caso de la propia Secretaría de Finanzas, que prevé una reducción de su capítulo 1000 (nómina).
Más de la mitad del incremento en ese capítulo (también conocido como servicios personales) tiene que ver con las áreas de seguridad y la contratación de policías y el mejoramiento de sus percepciones.
Creo que el sacrificio, que ascendería a 127 millones de pesos, vale la pena.
En cuanto a la deuda, que es el otro tema preocupante, realmente tenemos que ir a una solución de fondo. El desorden con el que cerró la administración anterior forzó a la contratación de múltiples créditos de corto plazo que comprometieron nuestra situación financiera y, finalmente, nos llevaron a la contratación de un mega-empréstito para tratar de darle orden a las finanzas públicas.
Pero hay un elemento que no se ha podido resolver y es el llamado “déficit educativo” que, este año (aun con las partidas extraordinarias que otorgue la Federación) rebasará los mil millones de pesos. Otro tanto se estima para el 2012.
Para mí gusto en ese tema no queda de otra más que buscar una alianza estratégica con otros estados afectados por la Ley de Coordinación Fiscal (en lo que a gasto educativo se refiere) como Michoacán, Sinaloa, Guerrero y Oaxaca, e impulsar una modificación a la manera en que se integran bolsas como el FAEB.
Creo que en ese propósito tanto el Ejecutivo como el Legislativo tenemos mucho qué hacer, siempre y cuando nos decidamos a actuar a la brevedad.
Conclusión. En resumidas cuentas, por las razones antes enunciadas, he decidido respaldar la propuesta de Miguel Alonso para enfrentar el próximo año una complicada situación económica. No hay presupuestos que den soluciones perfectas a los problemas; hay presupuestos posibles que solucionan problemas.
*Diputado local
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